Desde la Patagonia chilena, Fernando Palacios Moreno, autor de Ceguera de rostros y Takiwatanga, nos entrega una obra que desafía los límites de lo real y lo mágico. Con una pluma que combina sensibilidad y precisión, Palacios explora las fisuras del alma y los silencios que hablan más que las palabras, invitando a los lectores a vivir y soñar a su propio ritmo.
Takiwatanga, que en maorí significa "su propio espacio y tiempo", es una compilación de relatos breves que nos transportan a mundos escondidos en lo cotidiano. A través de historias que abordan el amor, el duelo y el misterio, el autor nos lleva a contemplar aquello que nos sacude y que no siempre tiene cabida en nuestro conocimiento. "Así como hay gente que baila, canta, esculpe o cocina, yo leo y escribo. No tuve dudas de que en algún momento iba a empezar a escribir bastante", comenta Palacios sobre su motivación para crear esta obra.
El autor, nacido en Valparaíso y actualmente residente en Caleta Tortel, ha encontrado en los cuentos cortos su forma de expresión más natural. "Sinceramente, no me es difícil escribir cuentos. Casi siempre improviso, porque cuando escribo la primera palabra o frase, no sé de qué tratará este cuento. Lo escribo sin interrupción y luego lo reviso al día siguiente", explica.
Además de Takiwatanga, Palacios publicó en 2024 Ceguera de rostros, una colección de relatos que exploran la fragilidad de la experiencia humana, donde lo ordinario se entrelaza con lo inesperado. En esta obra, el autor aborda temas como el amor perdido, la infancia y la incapacidad de reconocer rostros ajenos, dejando al lector con una sensación de cambio y vacío existencial.
Con influencias que van desde Stephen King y Tolkien hasta Óscar Castro y Borges, Palacios se define como un escritor prolífico, con la ambición de convertirse en uno de los autores chilenos con mayor número de libros publicados. "Dos o tres por año, y sin apurarme, puedo escribir cuatro libros cada doce meses", asegura.
Takiwatanga y Ceguera de rostros son libros ideales para quienes buscan relatos breves y evocadores, perfectos para disfrutar con un café o un cigarro. Cada cuento es una invitación a reflexionar sobre lo intangible y lo humano, dejando al lector con una sensación de asombro y conexión.
Ambas obras están disponibles en librerías y plataformas digitales. Fernando Palacios Moreno nos recuerda que, en un mundo acelerado, siempre hay espacio para detenerse, soñar y explorar las profundidades de nuestra propia alma.
Publicado 2025-04-10