¿Alguna vez regresaste de unas merecidas vacaciones y te encontraste una desagradable "sorpresa" dentro de tu refrigerador? Alguna fruta descompuesta o una leche agria pueden arruinarnos la sensación de relajo tras volver a casa.

A continuación, importantes consejos de mantención y cuidado de tu refrigerador ante una salida prolongada de casa.



Tecnología Flex, ideal para vacaciones

"Lo primero es determinar cuánto tiempo duran las vacaciones para saber qué clase de alimentos son los que puedes conservar en el refrigerador", dice María Ester Oyarzún, Product Manager de Refrigeración de Samsung Electronics Chile. "Si son quince o veinte días, hay alimentos que es mejor retirarlos del refrigerador, como frutas, verduras o embutidos".

Una innovación que es muy útil para situaciones como ésta es la tecnología Flex, presente en la nueva línea de refrigeradores Bespoke, el primero del mercado con características modulares. "La tecnología Flex te permite transformar el módulo de una puerta de refrigerador a congelador, y viceversa, un recurso muy útil ante una salida prolongada de casa, evitando así la descomposición de los alimentos, en una acción que no toma más de tres segundos realizar", explica Oyarzún.





Mantener el nivel de humedad

En caso de que no quieras eliminar alimentos que ya tienes en el refrigerador, o si tu salida de casa no será tan prolongada, la clave según la experta de Samsung es mantener el nivel de humedad interna del refrigerador, lo que extiende la vida de los alimentos. "La mayoría de los refrigeradores mantienen el 20% de humedad, lo que provoca que se sequen. La tecnología Twin Cooling Plus, presente en algunos refrigeradores de Samsung, impide la transición de aire entre los compartimentos superiores e inferiores, acabando con la mezcla de olores y sabores. Son dos sistemas de enfriamiento independiente que permiten separar el congelador del refrigerador. De esta forma, es posible conservar el nivel de humedad hasta en un 70%, lo que hace que los alimentos duren hasta diez días, versus los tres días que duran en un refrigerador convencional", explica María Ester Oyarzún.



¡Cuidado con las bacterias!

La higiene interna del refrigerador es clave para evitar problemas en la época estival. Otra innovación disponible en refrigeradores de última generación es el Protector Anti Bacterial, que mantiene la limpieza e higiene del dispositivo al permitir que el aire pase a través de un filtro de carbono activo generando constantes procesos de esterilización y desodorización. "Como complemento a esta acción, el sistema dispone de una malla antibacterial que previene el ingreso de gérmenes", agrega Oyarzún.



¿Qué hacer si los "seres vivientes" ya llegaron a tu refri?

Digamos que leíste tarde esta nota y no alcanzaste a tomar las medidas necesarias para evitar la llegada de estos desagradables visitantes a tu refrigerador. ¿Cómo limpiar el refri?

Los refrigeradores con tecnología No Frost de Samsung facilitan una tarea de este tipo, pues solo basta con desenchufarlos y ya están listos para el proceso de limpiado, sin necesidad de esperar que éste se deshiele.

Antes de iniciar el proceso de limpieza, es importante considerar algunos puntos. "Primero hay que desenchufarlo, y luego vaciar su interior", advierte la experta de Samsung. "No es recomendable utilizar cloro, ya que es un producto abrasivo. También evitar usar líquidos de limpieza perfumados o paños con fibras metálicas que pueden rayar las superficies internas del refrigerador. Lo mejor es un paño limpio con abundante agua y un toque de jugo de limón, y para los olores, un pequeño recipiente con café granulado".



Bonus track: consejos para mantener alimentos en perfecto estado

Verduras que no se marchitan. Lávalas y consérvalas en un envase hermético con toalla de papel dentro. Es muy importante que las verduras queden siempre separadas de las frutas, porque juntas aceleran su proceso de descomposición

Pan siempre rico. Muchos conservan el pan dentro del refrigerador para prolongar su vida. Si es tu caso, la recomendación es trozarlo y guardarlo en un contenedor hermético de alimentos o bolsa de papel craft. Para que dure aún más, un buen consejo es congelarlo.

Ojo con lácteos o derivados. La leche, la mantequilla o los distintos tipos de quesos no debieran estar más de tres días en el refrigerador una vez abiertos. Congelados, no más de una semana. En ningún caso ubicarlos cerca de los huevos, para evitar la contaminación cruzada.